martes, 14 de diciembre de 2010

jueves, 9 de diciembre de 2010

Porque es bueno para todos los santiagueños defender al campecinado local?

Porque cuidan la tierra en la que vivimos todos y en la que vivirán nuestros hijos... Yo también adhiero...

Carta Abierta
La tierra está en la agenda

El Colegio de Santiago al Movimiento Campesino de Santiago del Estero 
Con esta carta queremos expresar nuestra adhesión y apoyo activo a la movilización que las asociaciones integrantes del Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE) realizan desde hace un mes en Vilmer, sobre la ruta 34.
Desde su nacimiento -en 1990/91- esta asociación ha planteado con firmeza la defensa de la tierra y los recursos naturales y culturales que forman parte de su patrimonio ante el avance de la frontera agropecuaria. Lo hicieron con organización y valentía, y hoy el MOCASE es una referencia insoslayable para comprender a Santiago del Estero en el presente, como territorio donde coexisten legalidad e ilegalidad. Es pública la información sobre títulos de dudosa legitimidad, la presión material e institucional que ejercen algunos titulares de una escritura (“dichos dueños”) a veces indebidamente con el concurso de las fuerzas del Estado.
En simultáneo con una política de “crecimiento” se produce la apropiación de la tierra mediante la fuerza. Suman miles las familias desplazadas, y miles las amenazadas de desalojo. De este modo resultan vulnerados los derechos de los poseedores originarios a mantener su dominio del territorio, sus costumbres y creencias, configurando un gravísimo cuadro de agresión, desplazamiento y amenaza.
En los últimos años los distintos organismos del Estado han venido sostenido acciones independientes, poco congruentes entre sí, y en algunos casos contradictorias. Puede afirmarse que el gobierno provincial no ha dimensionado aún la gravedad del problema, ni ha reunido antecedentes para formular una política activa sobre tierra, ruralidad y cultura.
El problema de la tierra en Santiago del Estero involucra los derechos de la población provincial al espacio vital productivo y reproductivo necesario para mantener costumbres, idioma, estilos y artes de hacer, identidad de pueblo y de comarca, a pesar de las presiones para abandonarlos. La actitud gubernamental de no reconocer la identidad de las asociaciones y sus representantes es parte de esa ausencia de política y conocimiento técnico. Del mismo modo, la prensa oficial y sus adherentes no cuentan con información confiable sobre el tema y por lo común lo omiten o distorsionan
Por ello solicitamos a los/las dirigentes en el ejercicio de roles representativos públicos o privados con responsabilidad social:
·  Equidad y respeto en el trato, en consonancia con lo establecido en la Constitución Nacional (Art. 14º y 16º) y los tratados internacionales que nuestro país ha suscripto.
·  Seguridad humana para las familias rurales amenazadas por el desalojo o el desplazamiento, y resarcir a las que lo han padecido. (El Art. 17º de la Constitución Nacional garantiza que la propiedad es inviolable y ningún habitante de la Nación puede ser privado de ella, sino en virtud de sentencia fundada en ley).
·  Reformas legislativas que faciliten y abaraten los procedimientos para las acciones de prescripción por parte de los poseedores.
·  Unificación de conceptos y procedimientos en los casos en que se producen conflictos por la tierra, para lograr un actuar congruente entre los organismos técnicos con incumbencia en producción, desarrollo, agricultura familiar, cultura y derechos humanos, justicia y fuerzas de seguridad.
·  Políticas dirigidas a promover el desarrollo local de las comunidades rurales, con la participación de las asociaciones de base, ong’s y organismos gubernamentales.
·  Proyectos culturales dirigidos a comunidades rurales que permitan superar la brecha de inclusión y formación que las separa de las zonas urbanas.
·  Competencia técnica e imparcialidad por parte de los actores del sistema político-institucional.
·  Ampliar la información sobre la problemática rural
Deseamos reconocer la labor de las organizaciones no gubernamentales y sus técnicos y promotores que acompañan a las familias rurales en sus proyectos de producción, organización y promoción, así como a los/las comunicadores/as de la prensa independiente y de radios comunitarias que en las últimas décadas han tratado en su justa dimensión el problema. Y al apoyar al MOCASE en sus justas demandas, creemos oportuno:

·  Solicitar a las comunidades de hermanos y hermanas que lo integran superar las divisiones de la última década –propias de la evolución de un movimiento social- en dirección a una mesa donde todos estén representados para sumar fuerza desde la diversidad organizada.
· Propiciar una política de restitución de derechos a la tierra para los pobladores y comunidades de las regiones rurales. Nos proponemos sumar nuestro trabajo hacia este objetivo prioritario, para articular una acción conjunta que en la próxima década permita alcanzar logros efectivos.
Hoy la fuerza de las organizaciones de nuestras regiones rurales ha resurgido. La distancia de clase y espacio ha comenzado a resquebrajarse. La subalternización histórica de origen social y género comienza a ser el residuo del pasado. Saludamos con un abrazo fraterno a las personas e instituciones que los representan, poniendo la palabra y el cuerpo en cada acto.

Tasso Alberto Rodolfo
Martínez, Ana Teresa
Canevari, Cecilia
Tasso, Victoria Carolina
Espinosa, Mariana Esther
Foro Ambientalista Santiago del Estero
Zurita, Carlos Virgilio

lunes, 6 de diciembre de 2010

Historias de Vida.... Trinidad entre Clodomira y Campo Gallo...

Este relato fue escrito por Trinidad Lucia Pérez en el marco del curso de Historia de Santiago del Estero en el Bicentenario, organizado por el PAMI y la FHCSyS de la UNSE. La consigna propuesta fue el rescate de las vivencias de los afiliados del grupo Clodomira y la redacción de una página en la que contaran una anécdota. Del manuscrito de Trinidad se respetó su forma de expresión, la cual no quisimos modificar, solo hicimos algunos agregados entre paréntesis para aportar lo comprendido en la narración oral sobre los mismos acontecimientos hechos por la autora del manuscrito. Se omiten además algunos apellidos para preservar la identidad de las personas aludidas por criterio de la presente edición.

Cóndor Huasi, 22 de noviembre de 2010 Dto. Banda
      Yo Trinidad Lucia Pérez, hija de Manuel Pérez Arena, Nacionalidad española Granada, y Romidia Ortega, Argentina. Éramos siete hermanos, hoy cinco somos unidos gracias a Dios, Roberto y Antonio fueron granaderos en Buenos Aires.
      Relato la historia del paraje: Palmares donde yo me crie, dista a 15km de Clodomira[1], le pusieron este nombre por que había abundantes palmeras en esos montes los cuales sus dueños fueron Los Vidales, tierras vírgenes y fértiles. Muchas ect (hectáreas) fueron vendidas a nuevos agricultores hasta un Sr. Teodoro Rivero de Brasil. Sus habitantes fueron la mayoría españoles que vinieron a hacer Patria en la Argentina; trabajando sin descanso y sin ninguna ayuda, con esfuerzo y mucha fe, también algunos árabes trabajaron mucho, y todos murieron pobres, lo que se cosechaba no valía y los acaparadores (intermediarios, acopiadores) como siempre hasta ahora (aun hoy) ponían el precio y ellos si hacían estudiar a sus hijos y tenían casas y galpones en todas partes.
      Mi padre vino a la Argentina, después de la guerra, era presidente, el generalísimo Franco en el año 1928 (en España), él nos contaba que paso mucho sufrimiento trabajando en las minas, acarreaba en carretilla piedras (que levantaba) a mano, no había otro trabajo, se acobardó y decidió venir. Pasó a Tucumán, (allí) trabaja manejando (un) coche Mateo después vino a Santiago del Estero, arrendando tierras, lo hizo en varias localidades, dicen los que lo conocieron que no desperdiciaba los días, no tenía descanso, lo hacía hasta en temporales, finalmente compro en Palmares 63 ect. (hectáreas), llego a ser patrón, fue una persona que ayudaba con lo que podía a los demás, muy humana, nunca tuvieron valor los agricultores (y) menos los productos, los compradores eran Francisco M…, que llego a hipotecar las tierras de algunos por no poder pagar y les quitaron: Enrique R., José y Antonio R., Jorge J., Yamil A., Ailan y Josame; se trasladaban los fardos y otros productos en carros que salían en caravanas tracción a sangre, cargaban los vagones a Salta, Tucumán, Bs. As.; en la estación Clodomira y La Aurora.
En Palmares no había escuela, nos trasladábamos a Negra Muerta, en caballos, sulky o a pie 30 km. Ida y vuelta, daban clases hasta los sábados, a veces nos enfermábamos en el camino.
Una anécdota: Los más grandes nos hacían tener miedo, con una dichosa “pavita”, nos imaginábamos un bicho grande, cruzábamos una finca grande donde había hacienda (ganado) y decían que venía el toro malo, entonces corríamos hasta el cansancio, no dábamos más, eso era cuando íbamos a pie, también nos quitaban el sulky o el caballo y ellos se acercaban a sus casas, les avisábamos a los padres y eran reprendidos, hoy lo recordamos y nos causa risa.
Mi padre convocó a los demás para gestionar una escuela en Palmares, había muchos chicos y algunos no los mandaban porque quedaba más lejos, una vez aprobado (la gestión), Felipe Correa, un vecino prestó dos piezas (habitaciones) para dar clase con N° de escuela 620 nacional, empezó con una maestra de Clodomira, luego con la ayuda dentro de lo que podían construyeron una escuela rancho de tres aulas, dirección y una galería pequeña, se organizó la comisión cooperadora, en la cual fue presidente mi papá hasta el día de su muerte, desde 1945 a 1963; pero todos tuvimos primaria completa, eso sí, no pudieron hacer estudiar a sus hijos alguna profesión en Santiago del Estero. Todo eso requería mucho dinero para pensiones, hoy gracias a Dios se puede en Clodomira, solo se requiere voluntad, hoy la escuela funciona con nuevo edificio T. Rivero donó el terreno.
A beneficio de la misma se organizaban bailes sociales, fueron tiempos que ya no vuelven jamás, había mucho respeto, los padres llevaban a sus hijas con ropas de organsas y los jóvenes de traje y corbata, además pedían permiso a sus padres para bailar con las hijas, no había muchas fiestas, solamente las de la escuela, sala de primeros auxilios o carnavales, que eran de día, de 13 a 21hs.
La gente era religiosa, nos visitaban unos Franciscanos, vestían sus ropas hábitos marrón, con un cordón en la cintura y sandalias.
Los días domingo muchas veces fuimos a Clodomira, a la Iglesia, cuando alguien moría se le hacia la novena y la última noche, a los nueve días, se preparaba el cuerpo presente dando la forma del ataúd con caña hueca, tapado con tela negra, si era niño, todo blanco y con alas de ángel, costumbres de antes.
En este lugar enseñaban corte y confección, yo aprendí mucho porque me gustaba, luego seguí por correo y me perfeccioné en Academia Parisienes; cortaba y cosía a mis vecinos, solo tenía 16 años, a los 17 años me case con Prospero T. Gutiérrez que trabajaba como maestro en el departamento Alberdi, él vivía en Cóndor Huasi.
En Campo Gallo, desde allí había que trasladarse 60 km. Hasta Campo del Águila donde quedaba la esc. 598, lugares inhóspitos, ahí siendo muy joven  viví el otro lado de las cosas, valore todo lo de antes y me sirvió para enseñarles a mis hijos; a lo largo de la vida me sirvió. Cuando escaseaba el azúcar había que ir a encargar los alimentos. Por ejemplo, no tenía azúcar, no se conseguía la (azúcar) negra, agarraba el hacha y me iba al monte a buscar miel la que era (llamábamos) “yana”, una abejita pequeña, no agresiva, pero si cortaba el cabello, había que atarse la cabeza, entonces la arrastraba (al hacha) para que marque por donde caminaba y volvía por la marca, así no me perdía. Los quebrachos tenían 300 o 500 años, inmensos, también la miel de “aspamishky”, lo hacían en los huecos de la tierra, se lo conocía porque volaban como dos metros de alto en línea recta y se metían en el hoyo, lo hacían en forma de caramelo masticable. Quiere decir “tierra dulce”, también había “lachiguana” de avispas colgadas de los gajos. Conocí las marcas que hacían los indios para subir en los quebrachos, los calaban hasta arriba pisaban ahí colgados con cueros.
También pillaba los conejos. Llegaban hasta el patio de la escuela, los perros los corrían y se metían en los huecos de los taninos, la gente trabajaba en el obraje, había una chorva, una máquina de tren, pero chiquita con varios vagones, tenía vías angostas, las cargaban de madera desde Santa Felisa a Campo Gallo, el dueño fue un terrateniente Marino Cabesa, murió cuando cayó su helicóptero incendiado en La Aurora, dicen que había dólares por todas partes cuando cayó.
En el lugar de la escuela no vive nadie, la trasladaron a la 598 a Guachana.
A Cóndor Huasi volvimos en el año 1958, quiere decir en quechua casa de cóndor, mis suegros estaban muy ancianos y quiso (mi marido) quedarse con ellos, yo lo acepté; en esta localidad dicen que había un brazo del rio Dulce, muchos bañados, cuando Clodomira se llamaba “Las Piruas”, entonces en los años 1900 o más, anidaron los cóndores, colinda con los campos que eran de los Herrera, donde conchababan personas para trabajar, los tenían como esclavos, contaba mi suegro, los conocía mucho, les daba de comer en bationes de madera con cucharas de madera, a todos juntos y cuando se portaban mal los ponían al sol atados cara arriba, estaqueados le llamaban, o los encerraban o cepo.
Trabajaba yo en la finca, a la par de mi marido, siempre me gustó el campo. Tengo cuatro hijos maravillosos: Maria Cristina, Walter Omar, Wilton Gerardo y Anita Vanesa. Uno es maestro de grado y la última profesora de biología, para poder hacer eso trabaje bastante y conseguí (un cargo) como ordenanza en Siete Arboles, ya por lo menos me ayude algo mi marido en la finca, los viejitos me los cuidaban cuando no estaba, estoy con la conciencia tranquila porque los cuide hasta el día que murieron, ya 87 y 92 años, es largo de contar. Pase muchas cosas tristes y también alegres.
A Siete Arboles lo llamaron (así) porque de una planta de algarrobo salía una raíz de la que brotaron seis algarrobos más, aún existe este lugar, fue de la familia Carabajal.
La escuela Nro. 162 José Martí la fundo Moreno Saravia, era la casa de él, luego la vendió a Madalino Cruz, pero ya estaba muy mal. El Consejo (de Educación) le alquilaba a este señor. Cuando entre en este establecimiento fue en 1961, después daban clase bajo los árboles, dos aulas, concurrían más de 100 alumnos, director Gerardo Gutiérrez, muy querido por la zona y respetado, exigente con los docentes y bregaba por un edificio nuevo. El personal alquilaba un sulky y se trasladaban desde Clodomira 50 km. Ida y vuelta. En el año 1968 murió cuando estaba hablando un discurso, tenía mal de chagas, aquello fue inesperado.
Seguimos con el propósito del edificio, yo hable con el dueño de la tierra y nos donó una parcela, formamos una comisión vecinal. Lo hice desmontar y construimos dos aulas. Funcionaban en dos partes en distancia de 500 metros. Yo era la tesorera y entre todos trabajamos mucho, en 1970 se aprobó para el edificio nuevo, de eso se encargaba la nueva directora. Se construyó en 1972, la inauguramos con una fiesta grande, vino la banda de música y el Consejo General de Educación. Invitadas todas las escuelas vecinas, todos donaron la comida, una vaquillona asada con cuero y muchas comidas más.
Yo colaboraba con todo el personal cuando no venía algún docente, yo apoyaba la clase, hacia visitas domiciliarias como si la vida de los padre y mía, gente pobre, trabajadores, respetuosa. Antes nadie les daba ayuda de nada, no como ahora, también había el libro de firmas, ayudaba en la dirección con lo que requerían, fui apreciada y querida por todos los maestros y directores en el transcurso de 33 años. Mi cuaderno de actuación es bueno, cuando me jubile en el año 1994 me despidieron con una fiesta, me dieron una medalla de oro, lo más importante para mí fue que he sido útil para la comunidad hasta ahora cuando me requieren. Tanto Palmares como Siete Arboles tiene sus nuevos establecimientos escolares.
Finalmente doy las gracias al PAMI por permitir contar como se vive en el campo y las costumbres, y por darnos clases de historia que quizás nosotros no sabemos, nos trataron muy bien, además nos llevaron a visitar el museo de Santiago, todo muy lindo, vimos las maravillas de cuadros, las pinturas y todo lo que trabajaban los indios y hasta como preparaban las pinturas naturales, las vasijas donde ellos se sepultaban. Los jóvenes del museo atentos nos explicaron bastante bien, todo bello gracias por todo.
No me imagine escribir esto, le deseo lo mejor al licenciado por esta oportunidad que me dio, cada carilla la viví como si fuera ayer.
Saludo atte.
Trinidad Lucia Pérez



[1] Ubicada 30 kilómetros al norte de la capital de Santiago del Estero.

sábado, 27 de noviembre de 2010

Seminario posgrado en la UNLP 29/11 al 03/12

Seminario

Posgrado

CONSTRUCCIÓN DEL ESTADO Y POLÍTICAS DE

GOBIERNO EN EL RÍO DE LA PLATA, 1810-1880

Año lectivo: 2010

Régimen de cursada: Cuatrimestral (segundo cuatrimestre)

Profesor a cargo: Guillermo Banzato

Carga horaria: 30

Período: 29 de noviembre al 2 de diciembre de 2010

Número de encuentros: 10

Horario: Lunes a viernes de 10:00 a 13:00 y 14:00 a 17:00 hs.

Aula: Instituto de Historia Argentina

1. FUNDAMENTACIÓN Y OBJETIVOS

En el marco del Trayecto Académico en Historia Económica del Doctorado en Historia,

este seminario se propone recorrer algunas de las vertientes teóricas del siglo XX que

han reflexionado acerca del Estado y el gobierno, revisar cómo la historiografía reciente

ha abordado el problema de la construcción del Estado en la Argentina y analizar una

serie acotada de políticas gubernamentales en el período 1810-1880 sobre las fronteras,

el poblamiento del territorio, la constitución de organismos de gobierno –con mayor o

menor nivel de formalización- en la campaña, la privatización de la tierra pública y la

fiscalidad.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Mesa de Historia en el Encuentro de Jóvenes Investigadores 2010 - EJI/10

En la semana del 5 al 9 de octubre se realizara el Encuentro de Jóvenes Investigadores 10 en la Biblioteca Sarmiento de Santiago del Estero.
El jueves 8 y el viernes 9 por la mañana están las mesas de historia, yo espero estar allí aunque sin presentar trabajos este año. Pueden obtener mas información en la pagina del EJI http://www.ejisde.org/index.html
Nos vemos...

viernes, 24 de septiembre de 2010

Santiago presente en las XXII Jornadas de Historia Economica - Rio Cuarto 2010

En la mesa 6 Julio Carrizo con "Tensiones fiscales: Reformas, Problemas y ¿Soluciones? Santiago del Estero entre 1841 y 1875"  y en la mesa 14 Rossi, María Cecilia – UNSE
Banzato, Guillermo – IdIHCS/UNLP/CONICET "Políticas y mercados de tierras en la frontera santiagueña del río Salado, siglos XVIII y XIX".  http://www.aahe.fahce.unlp.edu.ar/Jornadas/xxii-jornadas-de-historia-economica/mesas-generales

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Seminario posgrado Historia Economica GELMAN SANTILLI en Catamarca

Seminario de Doctorado. Segundo cuatrimestre 2010.

TEORIAS ECONOMICAS Y TRANSFORMACIONES SOCIALES
Las consecuencias económicas de las Independencias latinoamericanas


Facultad de Humanidades – Universidad Nacional de Catamarca


Profesores:


- Jorge Gelman- Dr. en Historia, Ecole des Hautes Etudes en Sciences  Sociales, Paris. Docente – investigador del Instituto Ravignani de la UBA.

- Daniel Santilli-: Doctor en Historia – Universidad de Buenos Aires  - Facultad de Filosofía y Letras UBA. Docente – investigador de la UBA.

Duración: 32 hs. (8 clases de 4 horas)

Fechas:

1er Encuentro: 2 y 3 de Septiembre de 9 a 13 y 16 a 20 Hs.
2do Encuentro: 21 y 22 de Octubre de 9 a 13 y 16 a 20 Hs.


Aranceles:

Curso de Posgrado con evaluación (doctorandos): 250 pesos (en dos pagos)
Curso de Capacitación (Graduados): 150 pesos (en dos pagos)
Consultar sobre formas de pago

Información:  tramascatamarca@gmail.com   (Doctorado en Ciencias Humanas)
                        Tel. (03833-422708 / 450168 / 452580)

jueves, 29 de julio de 2010

¿Qué estas investigando sobre Santiago del Estero?

Hagamos entre todos un indice de autores y objetos de la sociedad y el espacio santiagueños, que hayan sido trabajados o que estén siendo trabajados. Envíame un mail con un breve resumen o la ficha bibliográfica de los trabajos que conozcas o que estés produciendo y publicamos un listado aquí mismo. Te sirve a vos y nos sirve a todos...

Congresos, jornadas y encuentros...

XXII Jornadas de Historia Económica - Río Cuarto 2010


del 21 al 24 de septiembre
http://www.aahe.fahce.unlp.edu.ar/Jornadas/xxii-jornadas-de-historia-economica/


Convocatoria al Ciclo de Disertaciones en Ciencias Sociales  2010 INDES Humanidades UNSE  


Todos los jueves de agosto hasta noviembre 2010


http://fhu.unse.edu.ar/con_ind/convocatoria_ind.html

http://fhu.unse.edu.ar/index.html


Encuentro de Jóvenes Investigadores eji/10 Sgo del Estero 2010
 del 5 al 9 de octubre 2010


Organizadores:
FUNDACIÓN EL COLEGIO DE SANTIAGO / CONICET /FHCSYS- INDES- UNSE
Lugar: Biblioteca Sarmiento
Libertad 674, Santiago del Estero

miércoles, 30 de junio de 2010

Discurso santiagueño para el 9 de julio

Celebrar la independencia, es ya una señal de cuanto valoramos este principio, y qué tan presente deseamos mantener estas huellas en nuestras vida cotidiana, como santiagueños y como argentinos. 
El día que nos convoca es también un importante símbolo, ese  9 de julio nuestros antepasados tomaron la decisión de manejar como pueblo,  su propio destino, y hoy, es esa la herencia que atesoramos y  que nos proponemos defender con nuestras vidas, si fuera necesario.
 Pero ¿qué significación habrá tenido la independencia para los hombres y mujeres que protagonizaron esos días de 1816?
Pensar en aquellos tiempos  nos es de gran utilidad; aunque  no resulte una tarea sencilla a la hora de entender los sentimientos de los patriotas de esa época y la conciencia que la gente común tenia de esos sucesos.
En Santiago como en el resto de las provincias, fueron elegidos los representantes para el Congreso de Tucumán en el cual se tomaría la decisión fundamental.  Nuestra provincia, vivía y tenía otras características diferentes de las actuales, como por ejemplo, la capital santiagueña no era una de las ciudades mas pobladas. El desarrollo económico estaba ubicado más bien sobre el Camino Real, junto al río Dulce: Silîpica, Loreto, Atamisqui, Salavina y Sumampa; y en el Río Salado: Matará, Asingasta y Guañagasta. Algunos de estos pueblos han desaparecido y otros han perdido la importancia de antaño, pero en ese momento fueron centros de una floreciente actividad económica y social.
En consonancia con su desarrollo, estos eran los pueblos donde se elegían los representantes que luego concurrían Santiago para decidir si se asumían o no, los cambios que se estaban proponiendo, primero desde Buenos Aires, y  luego en el Congreso de Tucumán.

  Por supuesto, había diferencias internas en la política local y no todos tenían la misma idea de la nueva Nación que se estaba construyendo. Mientras Pedro León Gallo y Francisco de Uriarte participaban del las deliberaciones en Tucumán como representantes de la ciudad de Santiago del Estero, Juan Francisco Borges, hombre del interior provincial, no dejaba de luchar por los intereses locales que eran de alguna manera contrarios a los del Congreso. Intereses opuestos que con el correr de los años permitirían finalmente, desembocar en la autonomía provincial. Borges fue fusilado en 1817 y la autonomía se declararía en 1820.
Entonces ¿Qué significado tenia la palabra o concepto de independencia para todos estos hombres de la historia? ¿Qué significado tiene esta palabra o concepto para todos nosotros que nos encontramos aquí reunidos? Las ideas que nos formamos de la independencia como valor y estado de la sociedad pueden ser diversas, pero sin duda compartimos la esencia de su sentido.
Al decir independencia no podemos alejarnos demasiado de la idea de madurez humana y social, del estado y capacidad de autosostenerse de una persona o comunidad, No en el individualismo egoísta, sino en la armoniosa capacidad de compartir, solidarizarse y también de detener los excesos de los que no saben respetar.
Así supieron hacerlo los congresistas de las Provincias Unidas del Río de la Plata, así lo marcaron nuestros dirigentes provinciales en los sucesos de la Autonomía. Usando las armas cuando fue necesario, pero también negociando y acordando cuando el marco de respeto permitía que así fuera.
Y de esos sucesos fundantes, somos el resultado los santiagueños y los argentinos del presente. De esos ejemplos de coraje y diplomacia podemos tomar los valores para formar a nuestros hijos y sostener en el tiempo, una forma de ser independientes con un costado de firmeza y  otro de solidaridad.
Muchas Gracias…

sábado, 5 de junio de 2010

La Republica de Italia y el Bicentenario de la Revolucion de Mayo

Palabras alusivas al 64 aniversario de la instalación de la forma republicana en Italia leidas en acto protocolar del Viceconsulado de Italia en Santiago del Estero.
Por Alejandro Yocca
La situación particular de fragmentación política, territorial y cultural de Italia durante el siglo XIX gravito en la elección de un sistema monárquico de gobierno para posibilitar su unificación. Solo un rey podía representar la garantía que los pequeños estados italianos necesitaban para volver a unir sus territorios reclamados durante siglos por las familias reales de otras naciones de Europa.
El Antiguo Régimen en la figura del rey Víctor Emanuel III, fue finalmente el responsable en 1922 de la liquidación de la democracia italiana. Agobiados por las crisis económicas y los fracasos políticos en los intentos de ordenar la vida económica e institucional de la península, el gobierno real optó por negociar con un osado líder que por esos años conseguía el apoyo de las masas insatisfechas.
Así Benito Mussolini fue nombrado primer ministro y paulatinamente fue neutralizando o eliminando las instituciones de participación democrática, creando en su lugar otras que sumirían al pueblo italiano en la aventura del fascismo, el terror y la guerra.
En esos años de crisis muchos italianos llegaron a la Argentina y a Santiago del Estero, Europa en general e Italia en particular no tenían posibilidades para todos sus habitantes y los caminos a América estaban abiertos. Era tan común para un italiano venir a Argentina como lo fue durante mucho tiempo para los santiagueños ir a trabajar a Buenos Aires. Muchos tenían parientes que los invitaban a venir, otros elegían la aventura de atravesar el océano sin una meta clara, pero en todos los casos el estimulo era la insatisfacción de vivir en la escases material y cultural de una etapa muy dura de la historia europea como lo fueron las crisis económicas y las guerras mundiales del siglo XX.
Esa insatisfacción llevo a los que se quedaron en Europa a creer en la locura del fascismo y ante la ausencia de alternativas los pueblos se embarcaron en una guerra que solo dejo muerte, hambre y destrucción.
Al final de casi siete años de combates, las duras enseñanzas que esta experiencia les dejaba sirvieron de cimiento para comenzar de nuevo. Es en este contexto que los italianos decidieron por medio de un referéndum terminar con el sistema monárquico y fundar la república. Dos años después, siguiendo el rumbo que se habían propuesto, los italianos sancionaron una nueva constitución y decidieron la expulsión de la familia real, por la relación que esta había tenido con el régimen fascista de Mussolini.
En la nueva constitución se propuso  el actual sistema de administración de gobierno basado en la forma republicana parlamentarista con una democracia representativa y multipartidista. El poder ejecutivo quedó a cargo del Consejo de ministros  liderados por el jefe de gobierno (Presidente del Consiglio dei Ministri), informalmente llamado primer ministro por ser uno de los cinco cargos más importantes del país junto a los de presidente de la República, presidente del Senado de la República, presidente de la Cámara de diputados y presidente de la Corte constitucional.
El poder legislativo se reasigno al Parlamento, que había sido disuelto, y al Consejo de ministros. El poder judicial se propuso en la nueva constitución como un campo independiente del ejecutivo y el legislativo, y gracias a ello tuvo un importante protagonismo durante los duros años de las décadas de los 60 y 70 llamados en la península Anni di Piombo, un periodo de inestabilidad política en el que los italianos se manifestaron en un clima de violencia callejera y luchas armadas.
Con una particular historia, sin duda diferente a la del pueblo argentino, los italianos festejan hoy la realización de un paso de madurez. En el marco del Bicentenario de nuestro primer paso de madurez como nación, acompañamos el festejo de nuestros hermanos italianos que caminan en la misma dirección. Buscan garantizar un Estado político en el que todos los ciudadanos puedan expresarse y gozar de los derechos básicos que ningún país en el mundo puede ya negar.
Festejar la instalación de la República Italiana, es entonces una oportunidad más para declarar nuestra adhesión a esta forma de organización que por el momento nos da las mayores garantías para el desarrollo de las personas en sus planos económico, social, político, cultural y espiritual.
Feliz día italianos, feliz día argentinos, y feliz día para todos.
Muchas gracias.

martes, 20 de abril de 2010

El cabildo abierto del 22 de mayo. Pensamientos para una reflexión de cara al Bicentenario.

Mencionando a Jauretche, Galasso* (2005) reflexiona sobre las polémicas historiográficas y los intereses políticos e ideológicos que han hecho uso  de la recordación de los hechos de la revolución de mayo.
Este nos advierte que la idea de que el golpe político llevado a cabo por la “gente decente” del Cabildo, es un punto de partida para colonizar mentalmente a los argentinos y llevarlos a la errónea conclusión de que el progreso obedece solamente a la acción de la “gente decente”, especialmente si estos son amigos de los ingleses o los norteamericanos. En este sentido se encolumna la acción de un político e historiador como Bartolomé Mitre, cuya acción para la exaltación de los prohombres de la Argentina Colonial e independiente se impuso por décadas en los programas escolares, en los discursos de los intelectuales y en los suplementos culturales de los diarios y las revistas que en su mayoría difunden las ideas sacralizadas por Mitre y la elite conservadora de fines del siglo XIX. Vaciada de  conflicto y de protagonismo de los sectores populares, esta “historia boba” aburrió a generaciones enteras de estudiantes, que no terminan de entender lo trascendente de un proceso del cual se esconden sus motivaciones e intereses sectoriales.
En el mismo texto, Galasso señala que en el plano ideológico, la defensa del liberalismo, base de los procesos revolucionarios de la burguesía contra los privilegios del antiguo régimen absolutista, tenía en el Rio de la Plata un sentido diferente y entre sus partidarios se había planteado ya en los sucesos de Mayo de 1810 una profunda división.
Por un lado los que sostenían los reclamos desde un liberalismo nacional y latinoamericano orientado a la construcción de la nación, la modernización de  las formas de producción y el desarrollo de una democracia política.
Por el otro lado, los liberales conservadores u oligárquicos, que sustentaban un proyecto elitista, secesionista, porteñista y anti latinoamericano.
Galasso considera al tratamiento de los acontecimientos del 22 de mayo como el centro de la fabula, con la que se intenta dejar claro en la memoria de los argentinos y peor aun de los que se están formando en la escuela, que solo la gente selecta, “la gente decente”, las minorías, pueden hacer la Historia.

Galasso, Norberto. La Revolución de Mayo, Colihue, Buenos Aires, 2005.

lunes, 19 de abril de 2010

Memoria y olvido en la era de los Juárez:

Espacios de formación profesional de la historia en Santiago del Estero durante la segunda mitad del siglo XX

 

Introducción


Una de las maneras más elementales de evaluar el desarrollo académico del estudio de la historia en Santiago del Estero fue en un primer momento la comparación de lo que sucedía en esta provincia con lo que sucedía en el resto del país. En contacto mas fluido con estudiantes y docentes de la escuela de historia  de la U.N.T y en menor medida con estudiantes y docentes de historia de otras universidades del país en distintos encuentros y congresos, noté en la última década algunas diferencias entre sus comunidades científicas y la mía, y que esas diferencias no siempre parecían fundarse solamente en las carencias propias de la condicion periférica de la economía santiagueña sino mas bien en algunas prácticas que con alguna continuidad se han instalado en diferentes espacios de esta sociedad.
A partir de esta problemática ensayo la siguiente hipótesis: Los espacios de formación profesional en la segunda mitad del siglo XX  se apartan y en algunos casos frenan  el desarrollo  de la historia crítica local.
Desde esta hipótesis que inicialmente incluía a la historiografía local pero que no trataré ahora por ser este un adelanto de resultados,  sugiero enfocar a los institutos de formación de profesores de historia que fueron exclusivamente provinciales hasta los últimos años del siglo XX.
La selección del período se funda en la inicial convicción de las continuidades en las políticas de cultura y la educación de los gobiernos que se sucedieron, ya sea democráticos o de facto, y la inercia conservadora obrante en los distintos ámbitos de la vida provincial. De todas maneras, la virtual inexistencia de trabajos de investigación que analicen este problema hace necesario que se asuman los riesgos inherentes a las fundaciones.

La comprobación de la hipótesis se buscará en el marco de los conceptos de memoria y olvido trabajados en numerosas investigaciones de la historia reciente[1] y el rescate del período de la dictadura militar (1976-1983) desarrollados en las IX jornadas interescuelas/ departamentos de historia
Se utilizaran técnicas de historia oral, análisis de estadísticas de egreso de los institutos de formación docente, porcentajes de docentes con titulo específico en funciones en los diferentes niveles de la enseñanza obligatoria y polimodal.
El trabajo se construye como una primera aproximación  a la problemática para la posterior formulación de las hipótesis que pudieran surgir a partir de la exploración motivada en la presente investigación.

La necesidad de replantear las miradas de la historia

Las conmemoraciones y los siglos llevan a los hombres y mujeres a elaborar balances y miradas criticas de lo que se esta haciendo y del como se esta haciendo.
En el ámbito de la historia podemos observar a Ricardo Rojas[2], como exponente de la cultura santiagueña haciendo hacia 1916, en los festejos por el centenario de la independencia, una critica al conocimiento de lo que en ese periodo había acontecido, y sin dejar de mostrar respeto por las obras de Bartolomé Mitre y Vicente Fidel López, cuestiona el enfoque centralista y porteño del relato de los acontecimientos de liberación y organización de la nueva nación.
Tiempo después otro pensador santiagueño no menos reconocido, Bernardo Canal Feijoo, en su “Historia en tres anécdotas”[3] se refería al escaso conocimiento que de los contemporáneos de Juan Felipe Ibarra se tenía y lo difícil que era analizar el período de los caudillos en la historia de santiago sin esa información de contexto: “poseemos muy pocos testimonios acerca de los principales contemporáneos de Ibarra. En la perspectiva del tiempo parecen distinguirse junto al tirano por una solemne ineptitud de hacer algo”[4].
A poco de comenzar el siglo XXI y en la conmemoración de los cuatro siglos y medio de la fundación de la ciudad más antigua de la provincia y del país se tornaba impostergable una reflexión acerca de lo que estamos haciendo los santiagueños con nuestra memoria. Empezar a armar un rompecabezas del que al principio disponemos de pocas piezas, que comienzan a sugerirnos una mirada del pasado reciente, de un pasado que llega casi hasta nuestros días y que hoy intenta motorizar a la reflexión y a la discusión dialéctica en todos los sentidos del termino.

Una aguja en un pajar:  desde el presente a las claves del pasado
Éste es el titulo que correspondía a la empresa de encontrar un santiagueño en las “IX Jornadas interescuelas /departamentos de historia” que recientemente se realizaron en la ciudad de Córdoba, a solo 430 kilómetros de la capital santiagueña. La búsqueda entre los centenares de asistentes era casi imposible por la numerosísima concurrencia. El intento a través del programa impreso no presentó menores dificultades ya que solamente los expositores superaban el número de 660 historiadores. Pero al fin pude dar con una sigla conocida, un sociólogo de la Universidad Nacional de Santiago del Estero UNSE exponiendo su análisis de las luchas de los campesinos en la provincia. Una “aguja” que ni siquiera tenía que ver específicamente con la historia pero que ponía de manifiesto la virtual ausencia de la comunidad científica santiagueña en estos ámbitos.
Otra cuestión que me resultaba contrastante con las realidades que viven los investigadores de otras provincias tiene que ver con la manera en que accedí a la información referente a la realización de este evento. Accidentalmente, participé de unas conferencias de turismo y educación en la ciudad universitaria de la Universidad Nacional de Córdoba y di un paseo por la escuela de historia, para ver si saludaba algún viejo amigo; en ese casual paseo vi un afiche de las jornadas que se realizaban la semana siguiente.
Este es el problema que más me motivo a seguir la pista de un problema que ya habíamos charlado con Alberto Tasso y que en gran medida se esta mitigando en la apretada agenda del Colegio de Santiago y en este espacio de expresión y reflexión que ha ganado el Encuentro de Jóvenes Investigadores este año en su tercera edición.
Mas contrastes. Algunos viejos conocidos responden a mis preguntas algo ingenuas. ¿Cómo llegan a producir tanto sin descuidar demasiado sus obligaciones familiares y laborales?. Si bien la competencia es intensa, los centros desarrollados de la ciencia histórica en las grandes universidades argentinas permiten trabajar con mayor accesibilidad a tres importantes canales: la vinculación con investigadores reconocidos, la información y las becas. Los tres factores se encuentran habitualmente juntos y uno lleva a los otros. Recién después de diez años de participar en congresos y jornadas venía a dar con algunas claves del contraste aunque lamentablemente lo hacía en soledad pero con la posibilidad esperanzadora de ponerlo en discusión en este espacio.
La dinámica de la producción historiográfica santiagueña no cuenta aún con el uso habitual de esos estímulos democratizantes que supone el camino de ascenso de los que más perseveran y estudian mas allá de las posibilidades económicas que tuvieren previas al ejercicio de la profesión de investigadores.
Pero ¿Cómo  es la vida de los investigadores en los espacios de formación profesional en Santiago del Estero? ¿Cuáles son las características del sistema en el que se cocinan sus capacidades de abordaje de los diferentes objetos de análisis?
Santiago tiene hoy una realidad para la formación de investigadores de la historia con acceso a un título de grado: la articulación de los profesorados provinciales de historia con una duración mínima de cuatro años con una licenciatura a distancia en Historia que esta arancelada y se dicta en la UNSE con una duración aproximada de dos años. Pero esta realidad no se comprende sin contexto y teniendo en cuenta que esta modalidad de articulación aún no ha dado sus primeros frutos nos circunscribiremos a la segunda mitad del siglo XX y a las características de la formación en el ámbito provincial.

La era de los Juárez

Mas una construcción discursiva del propio estadista Carlos Juárez, que un período probado desde las concepciones procesuales en cuanto a las continuidades que puedan observarse en este lapso de tiempo se eligió el mismo para empezar a armar el rompecabezas que propone la hipótesis. En lo que respecta a la formación profesional podemos hablar de tal a partir de la experiencia iniciada en 1962[5] con la creación del Instituto Superior del Profesorado Provincial Nº 1.
Carente aún de ámbitos de formación universitaria, la provincia tomó cartas en el asunto de proveer de docentes calificados a un nivel medio en explosiva expansión. La aparición de claustros para la formación de grado se cristalizará en 1969 con la fundación de la Universidad Católica de Santiago del Estero (UCSE) y en 1973 con la creación de la Universidad Nacional de Santiago del Estero (UNSE)[6] sin que se previeran en sus facultades el estudio y la investigación de la historia al menos de manera formal.

La historia de los acontecimientos contra la comprensión de los procesos como forma de  fragmentación del saber


El funcionamiento de la cátedra de Historia Americana y Argentina II en el ISPPNº1 fue en la década del 90 una muestra evidente de que en Santiago del Estero habíamos perdido el tren de la historia, pero esta vez como ciencia. La enseñanza de la asignatura desconocía a autores como Halperin Donghi, Chiaramonte o Sábato por mencionar a algunos que los estudiantes de entonces comenzábamos a leer con cierta fascinación. En ese momento el lugar de texto obligatorio de la asignatura era ocupado por “Crónicas de la historia argentina” en su soberbia cubierta de cuerina celeste y remates dorados. El aporte de bibliografía alternativa a la cátedra era considerado todavía en los ’90 un acto de subversión que recibía como respuesta la desconfianza y la hostilidad de la mayoría de la planta docente.

La cátedra de seminario como dique de contención


Otro de los espacios que obligaban a una mirada critica era la asignatura que en los noventa se había convertido en el dique de contención de los que buscaban la promoción de la carrera: Seminario de Historia Regional. Sin reglas claras, con un soporte legal dado por un Reglamento General de Institutos de Formación Superior que en forma sucinta normaba que el trabajo final elaborado en ese espacio era “una iniciación en las actividades de investigación”. Cientos de alumnos avanzados, algunos de ellos con mas de diez años de antigüedad en catedras del nivel medio y polimodal han vivido este “rito iniciatorio” en la investigación como una fijación en el sentido freudiano del término.
En la practica, ese trabajo se convirtió en una barrera infranqueable para muchos que debían realizar un camino marcado por las indefiniciones de la cátedra y una serie de criterios que cambiaban con el curso de la investigación. A esto debemos sumar las dificultades estructurales que se pueden aun hoy observar en las bibliotecas, museos y archivos de la provincia.

La investigación como experiencia traumática


De esta manera, se puso freno durante muchos años del periodo analizado a la promoción de animadores de la reflexión histórica y por la ausencia de una carrera similar en la universidad local también de investigadores  de las problemáticas locales. Pero en lo que hace a la investigación particularmente, el paso de los años siguiendo un mismo tema y en una cadena de frustraciones por no alcanzar la aprobación del trabajo fue convirtiendo la idea de ir a bibliotecas, archivos y otros reservorios de documentación en una experiencia de pánico. Esta vivencia traumática no tuvo aparentemente una intencionalidad ideológica por parte de los docentes encargados ya que los problemas que se generaron alcanzaron alternativamente a estudiantes de diferentes extracciones políticas y sociales. Un curioso ejemplo lo constituyen varios alumnos que llegaron a ser abanderados de la institución pero que a la hora de la promoción debieron esperar 5 y más años para lograr la aprobación y en algunos casos  aún no pudieron arribar a la presentación del trabajo.

La paranoia del plagio y el misterio de los trabajos de seminario


A falta de reglas claras para la realización de los trabajos de la asignatura mencionada, en la ultima década se plantearon numerosas advertencias desde la cátedra sobre el delito de plagio. Este delito que está tipificado y tiene estipulada su pena en la legislación vigente figuraba en el texto de un reglamento interno que finalmente no fue aprobado por las autoridades del ISPP Nro.1. En el texto del mencionado reglamento se atribuía a la cátedra de Seminario de Historia Regional la facultad de juzgar la comisión de ese delito y aplicar pena por la supuesta incurrencia. Este y otros excesos que desconocían normas generales en las cuales debía enmarcarse el reglamento terminaron por dejarlo sin efecto.
Relacionado también con la esta asignatura se fue generando una desinformación que incitaría a la construcción de miradas míticas desde estudiantes y docentes del mismo profesorado. Mas de 170 trabajos de seminario escritos por los hoy egresados de la carrera se mantuvieron fuera del alcance de los estudiantes que solicitaban acceder a ejemplos de lo que debían hacer como trabajos finales. Las repetidas negaciones ante la solicitud de consulta no se transformaron en denuncias por el temor a no egresar y posteriormente al egreso ya no se realizaban por el miedo a volver en unos casos y por la inercia de enfrentar nuevos desafíos en otros. La negación y la desinformación fueron generando mitos que en unas versiones situaban esos trabajos en bibliotecas privadas, a disposición de historiadores locales y hasta de visitantes de provincias vecinas y de otras.
También es importante señalar la existencia de una aparente “censura” de la falta de datos. Esta se materializaba con la sugerencia casi inobjetable de cambiar de tema por la ausencia de documentos que pudieran estar a disposición de los estudiantes desconociéndose en esos casos las técnicas de la historia oral y la importancia de su aplicación en un medio en el que se queman papeles y se borran pruebas para alentar la impunidad y burlar las seguridades mínimas que rezan las leyes.

La ausencia de competencia como agravante


Uno de los peores efectos que provoco la problemática descripta fue la virtual paralización y desarticulación de los espacios de investigación y reflexión de la historia en Santiago del Estero. Ni siquiera alcanzaban a cubrirse los cargos docentes específicos del nivel medio que eran ocupados por abogados, maestros, docentes de ciencias jurídicas y contables y otros profesionales que habían obviado inteligentemente el infranqueable muro y se encontraban ocupando el espacio de los profesionales de la historia luego de transitar caminos alternativos. Los resultados en el aula y la formación del pensamiento crítico de la propia historia quedaban también supeditados al azar de lo que finalmente resultó en cada caso. La falta de competencia por escasez de profesionales en unos casos o por falta de acreditación en otros se tradujo en el quietismo y subdesarrollo de la ciencia en la provincia mediterránea. La abundancia de trabajo hizo que los egresados alcanzaran rápidamente el limite de horas y no pudieran dedicarse a actividades de investigación que de alguna manera tiene que estimularse desde un espacio de sana competencia e intercambio. La escasez también aletargó las gestiones por la creación de un ámbito para que el estudio de la historia alcanzara el título de grado lo que se concretaría recién a fines de siglo.
En el caso puntual de la creación de la licenciatura a distancia en Historia en la UNSE, el  proyecto tuvo mas apoyo del centro de estudiantes que desde las autoridades de la institución pese a estar en vigencia durante su tratamiento la nueva ley de educación superior y un convenio marco entre la universidad y el ejecutivo provincial desde donde se promocionaba la articulación.

Mas que conclusiones caminos que se abren


A partir de este primer análisis es necesario que para un completo análisis de lo que recordamos y de los que olvidamos los santiagueños miremos también otros actores a los que le cabe protagonismo en este asunto; al estado y a las instituciones privadas e intermedias. En este sentido se torna muy necesario un estudio de la historiografía del período y de las relaciones posibles entre esta y las instituciones que se involucran en la construcción de imágenes del pasado santiagueño.
No podemos dejar de mencionar el florecimiento de espacios de reflexión en  estos últimos años y entre ellos el “Primer encuentro de jóvenes estudiantes investigadores”, generado desde un colegio privado (Nuestro Señor de los Milagros de Mailín) y que por iniciativa de sus docentes involucró a los institutos de formación docente de Santiago del Estero, Clodomira y Suncho Corral; a las “Jornadas de reflexión sobre la historia de Santiago del Estero” organizadas por la Licenciatura en Historia de la UNSE; y finalmente este tercer Encuentro de Jóvenes Investigadores organizados por El Colegio de Santiago, el primero y el último realizados con mas creatividad que presupuesto y desafiando al olvido con la fuerza del trabajo.
El camino por recorrer estará dado por la realización de numerosas investigaciones que traigan nuevas imágenes a nuestra memoria. Que develen la identidad de los hombres e instituciones que construyen la historia y el inconsciente colectivo de los santiagueños.

Anexo

Listado de instituciones relacionadas con la historia y la memoria en Santiago del Estero.


El Estado  Nacional
·       Licenciatura en Historia de la UNSE (arancelada)
·       Monumentos históricos nacionales

El Estado  provincial
·       Dirección General de Cultura de la provincia
Museo Histórico
Museo Antropológico y arqueológico
Museo de Bellas Artes
·       Profesorado en Historia del ISPP Nro.1
·       Jornadas de Historia de Santiago del Estero 1999 (museo) y 2000 (sirio)
·       Otros profesorados (Termas y Fernández de Historia y Literatura hoy inactivos; y Clodomira, Suncho Corral y Quimilí de Historia en actividad)
·       Colegios del 3er. Cilclo y Polimodal

El Estado  Municipal
·       Dirección de cultura de la Municipalidad de Santiago del Estero


Historiadores e Instituciones científicas y culturales
·       Historiografía santiagueña
·       Institutos que trabajan por la imagen de próceres (Sanmartiniano, Ibarriano, Belgraniano, Borges) .
·       Sociedad Argentina de Historiadores filial santiagueña.
·       UCSE
·       Sociedad Santiagueña de Heráldica y Genealogía.
·       Sociedad de Numismática y Filatelia de Santiago del Estero
·       Biblioteca Popular Sociedad Sarmiento
·       Colegios e institutos privados de educación
·       El Colegio de Santiago



Bibliografía


Lübbe, Hermann. Filosofía práctica y Teoría de la Historia, Editorial Alfa, Barcelona, 1983.

Alen Lascano, Luis C., Historia de Santiago del  Estero, Plus Ultra, Buenos Aires 1996

Alen Lascano, Luis C., La Educación en Santiago del Estero, en Retrato de un siglo, Ediciones El Liberal, Santiago del Estero, 1998.

Revista de la Sociedad Argentina de historiadores, Filial Santiago del Estero, Números 1 a 4 editadas durante los años 1993 y 1994

Canal Feijóo, Bernardo. Historia en tres Anécdotas. Revista Ñan – Nivel de Historia

Lami Hernández, José María. Historia de Santiago del Estero. Ediciones UNT 1994 San Miguel de Tucumán

Articulos periodísticos del diario El Liberal


Informantes entrevistados:


María Cecilia Rossi       UNSE
Carmen Quiñónez      Museo Historico Provincial
Velia Russo   Analista Dirección del Nivel Terciario – Subsecretaría de Educ. y Cult.
Julio Nicolao Egresado ISPP Nº1 - CISADEMS
Germán Montiel   Egresado ISPP Nº1
Gustavo Castellanos  Seccion Títulos – Dirección del Nivel Terciario
Eugenia Medez  Seccion Alumnos ISPP Nº1
Silvia Piccoli de Barron    Egresado ISPP Nº1
Marcela González  Estudiante ISPP Nº1
Hugo Herrero  Egresado ISPP Nº1
Luis E. Gómez   Egresado ISPP Nº1
Ana Melian   Egresado ISPP Nº1


1


[1] Viano, Cristina (UNR) y Schmucler, Héctor (UNC) en panel sobre Historia, Memoria, Presente realizado en la apertura de las XI Jornadas Interescuelas /departamentos de Historia (año 2003).
[2] En el libro “La Argentinidad”, publicado en 1916 con motivo del centenario de la declaración de la independencia, Rojas se había propuesto llevar a cabo una evaluación crítica del estado del conocimiento sobre el proceso de la revolución y la independencia destacando el escaso conocimiento de lo sucedido durante aquel período en los ámbitos provinciales. Rojas, a diferencia de Bartolomé Mitre y Vicente Fidel López había propuesto una interpretación de los acontecimientos mencionados desde la llamada “Intendencia del Norte” donde, de acuerdo con  su perspectiva radicaba el “núcleo más antigua de la nacionalidad”. Los problemas derivados de las luchas civiles y las guerras de la independencia eran analizados fundamentalmente a partir de la experiencia sucedida en el cabildo de la provincia de Jujuy. Ese era, al igual que otros similares del interior,  para Rojas, el ámbito en el que, con mayor fortaleza habían arraigado las ideas liberales, democráticas, republicanas y federales por contraposición a las tendencias monárquicas y centralistas propias de los medios porteños.
[3] Canal Feijóo, Bernardo. Historia en tres Anécdotas. Ñan – Nivel de Historia
[4] idem anterior.
[5] Lami Hernández, José María. Historia de Santiago del Estero. Ediciones UNT 1994 San Miguel de Tucumán.
[6] Idem anterior.